"La esperanza tiene dos preciosos hijos: sus nombres son enfado y valor, enfado es ver cómo son las cosas y valor es no permitir que continúen así". Sant Agustín.
"La esperanza tiene dos preciosos hijos: sus nombres son enfado y valor, enfado es ver cómo son las cosas y valor es no permitir que continúen así". Sant Agustín.